Lo primero de todo hay que saber que la Radeon Vega Frontier usa los últimos controladores Crimson ReLive disponibles funcionando el núcleo VEGA 10 con 4096 Stream Processors a una frecuencia Turbo de 1600 MHz mientras que sus 16 GB de memoria HBM2 lo hacen @ 945 MHz que, junto a una interfaz de memoria de 2048 bits, nos da un ancho de banda de 483.8 GB/s.
En el 3DMark Fire Strike, la GPU alcanza una puntuación de 21.202 puntos (tras varios test, fue capaz de alcanzar un tope de 22.986 puntos), cerca de los 22.585 puntos alcanzados por la GeForce GTX 1080 y lejos de los 29.425 puntos que alcanza la GeForce GTX 1080 Ti (ambos modelos MSI Gaming X con overclock). Nos vamos al 3DMark Fire Strike Extreme, y aquí vemos como la GPU de AMD escala al segundo puesto con 10.585 puntos frente a los 10.048 y 14.401 puntos de sus rivales. En la prueba más exigente, el 3DMark Fire Strile Ultra, la Radeon Vega Frontier arroja 5.336 puntos frente a los 5.431 puntos de la GeForce GTX 1080 y los 7.160 puntos de la GeForce GTX 1080 Ti.
Obviamente, hay que resaltar que no es una GPU enfocada al gaming al 100 por ciento, pero su modo gaming debería permitir eso mismo, y estas pruebas de rendimiento encajan con las filtraciones en el pasado de las Radeon RX Vega (orientadas al segmento gaming). Esto significa, que finalmente la GPU tope de gama de AMD luchará con la GeForce GTX 1080, donde los rumores avisan de un “precio agresivo” como la primera batalla que buscará ganar AMD.
Saludos.
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